Un día a la vez

Hasta hace muy poco creía que cuando salía con alguien, esa persona tenía que volverme loco, sacarme de mis cabales, hacerme sentir en las nubes, soñar con un cuento eterno con final feliz. Creía que el amor es cosa de entrañas y que si no sientes eso en el estómago no funcionará jamás. Yo le llamo a eso el “gut factor”. Aun no descarto completamente esta idea, pero tampoco me obsesiono con ella porque con el paso del tiempo he comprobado que no necesariamente quien te genera ese sentimiento es la mejor opción para empezar una relación.

Hoy se que las relaciones como las vemos en la televisión o el cine, con toda esa carga de amor desmedido, pasión desbordada y finales absurdamente felices, no existen. Tampoco existen los hombres perfectos que solo sonríen y tienen la vida ganada. Ahora prefiero pensar en que todos son seres humanos que cometen errores, sufren, lloran y van al baño. Y encima de todo, aun si fueran perfectos, la parte de poder conectar con alguien en un nivel más profundo es toda una odisea en nuestros días.

Lo más curioso de salir con alguien es que me doy cuenta de que no estoy tan listo como yo decía para establecer un compromiso a mediano/largo plazo. En realidad no creo que sea física cuántica, pero sí requiere sobre todo de disposición y apertura. Todos estos años en los que he ido de un extremo a otro, primero al tener una relación estable con alguien por 6 años y después por no haber conseguido tener una relación duradera de más de 3 meses con nadie, me han enseñado que las fórmulas no necesariamente existen o aplican a todos los casos.

Para mí hablar de fórmulas de entrada es complicado, pues no suelo regirme por convencionalismos. Sin embargo, soy más convencional de lo que me atrevo a aceptar. Como todos, también quiero estar con alguien y sentirme querido, apreciado y valorado. Incluso, confieso que en ocasiones suelo sucumbir ante las cursilerías y frases llenas de melcocha. Aun así, entiendo que las relaciones son mucho más que eso. Las relaciones son trabajo diario, una inversión de tiempo, esfuerzo, dinero y ganas, que después de haber estado solo por tanto tiempo, me cuesta trabajo entender.

Pero afortunadamente creo que estoy en el camino correcto. Intuyo que toda esa inversión tendrá frutos muy pronto. Me tranquiliza saber que estoy con alguien que no me va a llenar de frases románticas carentes de todo sentido, que me aprecia por ser quien soy y que ve en mí lo que mucha gente no ha visto. Es un tipo inteligente desde mi punto de vista, que por si fuera poco, tiene muy claro quién es y qué es lo que quiere.

Hacía mucho tiempo que no estaba con alguien con quien me sintiera cómodo. No tengo que pretender nada, ni esforzarme por llenar sus expectativas. Hasta ahora ha estado a mi lado sin pedir nada a cambio y a pesar de lo que ha vivido, aun cree. Todo entre él y yo está balanceado y aunque no precisamente sienta el “gut factor” con él, creo que a estas alturas es mejor que no lo sienta en su totalidad. Al final, las veces que lo he sentido, no he obtenido los mejores resultados.

En un momento pensé en que las cosas no estaban funcionando justamente por no sentir esto, pero conforme ha ido dándose todo, entiendo que es preferible que así sea, porque eso le da un punto de realidad a lo que vivo con él; al menos hasta ahora no me siento en un cuento rosa qe termina en un tormento gratuito y auto infringido.

Así que día con día las dudas se disipan y descubro más y más cosas en él que me llaman la atención y que me hacen querer seguir con él. Cada día recibo la cantidad justa de azúcar necesaria para saber que está interesado en mí. Y cada vez me convenzo más de que somos dos personas que ya sabemos qué es lo que queremos y lo que no de la persona que esté a nuestro lado.

Hoy estoy claro en que lo que nazca (si es que algo nace) entre él y yo se irá incrementando con el paso del tiempo pero por los medios adecuados. Poco a poco y paso a paso. Todo visto desde la perspectiva de vivirlo un día a la vez.

 
You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response.
3 Responses
  1. Excelente entrada ... me gusta la forma en que la que te expresas...

    Saludos y mucha suerte en lo que estás iniciando ...

    Aunque eso de no sentir mariposas, como luego dicen, en el estómago ... está canijo .. yo lo he sentido sólo una vez ... hace años.

    Pero ahora estoy en una relación estable y muy buena.

    Saludos

  2. Hola! Gracias por el comment y por leer. Saludos!

  3. fue interesante leer tus últimos dos updates al mismo tiempo, porque de alguna forma se contraponen

    yo añadiría que lo más dificil para mi de mantener una relación -en general a cualquier nivel pero obviamente más dificil cuando es a nivel sentimental-, es que te enfrentas constántemente a un espejo, y nunca es fácil conocerte más a través de otros.

    me gusta leerte de este ángulo, un abrazote!!!!!